Poetas, así llaman a los seres alocados del alma. Esos románticos empedernidos que viven a sombras de sus musas. Aquellos inexpresivos que sólo sienten el éxtasis al escribir.
Los llaman enfermos por entregarse a lo imaginario, en vez de admirarlos por atreverse a lo que nadie más podrá expresar.
Ellos prefieren la vida a escondidas en sus versos. Unos son perpetuamente entregados a las frases
metafóricas y los otros son sobrevivientes de los dolores del alma.
Así son, navegantes de los sentimientos e indecisos por quedarse en uno solo. Les aterra lo perfecto, pero como lo desean. Les gusta endulzarse el alma hasta con el dolor ajeno, como si vivieran a través de los ojos de otros, como si sintieran la angustia y la calma en un parpadeo.
Nos suplican que entendamos sus frustraciones, sus enredos mentales, sus angustias en recuerdos y los deseos más dulces de sus latentes corazones.
Nos suplican que entendamos sus frustraciones, sus enredos mentales, sus angustias en recuerdos y los deseos más dulces de sus latentes corazones.
Nos piden que nos dejemos llevar por lo que tienen que decirle al mundo: Que el amor también se vive con pesares y la tragedia te puede endulzar hasta los más sutiles suspiros. Que las tormentas no siempre traen tristezas y que las sonrisas no siempre son alegrías.
Les gusta desahogarse la mente con secretos escondidos entre versos sobre los rencores de la vida, las tragedias hechas risas, las alegrías que florecieron de sus heridas y la añoranza que trajo el frío viento al despedirse de ellos.
Pocos entenderán lo rebuscada que es la vida y de las heridas a corazón abierto. Pocos entenderán el vacío del ser y que puede ser libre con
tan sólo desaparecer.
Pocos lograrán entendernos. Vivimos como cualquier otro poeta en este mundo de carencia artística esperando que algunos entiendan el fin de nuestras premisas.
Pocos lograrán entendernos. Vivimos como cualquier otro poeta en este mundo de carencia artística esperando que algunos entiendan el fin de nuestras premisas.
Pocos entenderán que mi vida gira entre versos, que soy poeta y que mi arte no es para cualquiera.