Quisieras darle al mundo toda la pasión que vive en tu interior pero temes ser rechazada.
Temes.
Ese es tu mayor defecto. Le temes a vivir, temes intentarlo.
Porque piensas que es imposible lograr tus objetivos y prefieres mantenerlos como sueños. Quieres que la gente te escuche y pare de
ignorarte pero se te quiebra la voz cuando estás frente a ellos.
Temes.
Ese es tu mayor defecto. Le temes a vivir, temes intentarlo.
Y si continúas así, sólo habrás soñado, solo habrás vivido en
tus pensamientos y creación de escenarios. Sólo habrás vivido una mentira
porque jamás luchaste para que fuese verdad.
Vivirás en tu mente, en lugares imaginarios y al día de hoy te costará enfocarte en la realidad.
Vivirás en tu mente, en lugares imaginarios y al día de hoy te costará enfocarte en la realidad.
¿Y si mezclas tus sueños con el mundo real? Vivirías en
donde siempre has querido. Harías de tus pensamientos algo físico y palpable, harías que tu vida valiera la pena por ese instante. Dejarías de temer y
seguirías ese camino que tanto has anhelado. Ya serías escuchada y no le temerías al éxito.
Pero sigues temiendo.
Me pregunto yo, ¿Cuándo dejarás de hacerlo?